[dropcaps]Es inevitable. No puedes luchar contra los elementos. Y como dice el tópico, tampoco puedes ponerle puertas al campo. El cambio existe, es real y aunque no te lo creas [textmarker color=»C24000″ type=»text color»]TÚ[/textmarker] ya lo has empezado.[/dropcaps]
Mira lo que tienes en las manos, o encima de la mesa, o quizás en el bolsillo. O peor todavía, mira el soporte que estás utilizando para leer estas palabras. Se llama [textmarker color=»C24000″ type=»text color»]teléfono móvil[/textmarker] pero para lo que menos lo usas es para el teléfono. Llamadas pocas. Muchos mensajes, fotos, gifs, chistes, incluso notas de voz. Además de muchas otras funciones que te ofrece y que utilizas.
Por lo tanto, una vez admites que ya estás usando la tecnología el siguiente paso es aprovecharla al máximo. Pero no lo hagas por hacer. No te dejes llevar. Piensa, ordena, decide y actúa. Ya sea para tu negocio, tu idea, tu hobby o tu propia marca personal; pero [textmarker color=»C24000″ type=»text color»]debes estar en la red[/textmarker].
La tecnología, el online, el 2.0 no funcionan solos. Deben ir acompañados del offline, de lo de toda la vida. Es decir, si tienes un negocio o quieres ser tu propia marca necesitas un logo y un nombre. No lo hagas tu solo con Photoshop, haz una mínima inversión y déjalo en manos de profesionales, vale la pena. Y ese logo, te servirá para tu tarjeta de visita física por ejemplo, pero también para tu página web, si fuera necesaria.
Porque ahí está la clave: ¿[textmarker color=»C24000″ type=»text color»]por dónde empiezo[/textmarker]? Depende. Consulta a profesionales también, déjate orientar, pregunta y no te precipites. Según qué quieras conseguir deberás apostar por una u otra cosa. En la mayoría de casos te diría que es casi obligatorio que tengas una página web, pero quizás te puede servir con solo una fanpage de Facebook. Tampoco quieras estar en todas las redes sociales. Igual te interesa estar antes en Instagram y Pinterest que en Twitter y Google Plus.
Pero lo que es seguro es que no le puedes dar la espalda a este mundo en el que vivimos. Al menos darle una oportunidad, conocerlo, descubrirlo, buscar por dónde le puedes sacar beneficio. Porque no tengas ninguna duda que el 2.0 bien tratado ha venido para ayudarte.
Ábrele la puerta, déjale pasar y ¡[textmarker color=»C24000″ type=»text color»]disfrútalo[/textmarker]!