[dropcaps]Escribía hace unos días en este mismo blog sobre la necesidad de ir hoy a estudiar a la universidad. Se ha abierto un interesante debate al respecto en las diferentes redes y gracias a ello he descubierto a un gurú de la educación.[/dropcaps]
Se trata de Ken Robinson, un británico que incluso ha sido nombrado sir por la mismísima reina Isabel II. Su discurso se basa en renovar el sistema educativo ya que para él, entre otras cosas, [textmarker color=»C24000″ type=»text color»]las escuelas matan la creatividad[/textmarker].
Una de sus frases más conocidas es la que dice que “[textmarker color=»C24000″ type=»text color»]los jóvenes que estudian ahora harán trabajos que todavía no se han inventado[/textmarker]”. Brillante. Hoy en día hay gente trabajando como community manager, creador de páginas web, e-commerce, programador de apps, y muchísimos más empleos que no existían cuando iban a la universidad.
Y a partir de esta idea expone su propuesta de educación. Las escuelas y universidades no deberían enseñar aptitudes del temario, sino actitudes hacia la vida. Nos centramos en el resultado final de una nota de un examen y no en todo el proceso de aprendizaje. Estudiamos una carrera pero no sabemos a qué nos dedicaremos y en la mayoría de casos no tiene nada que ver.
Por lo tanto mejor [textmarker color=»C24000″ type=»text color»]centrarse en aprender actitudes[/textmarker]: la toma de decisiones, la búsqueda de soluciones, el trabajo en equipo, la elección de prioridades… Conceptos que nos serán útiles toda la vida y en cualquier empleo.[blocktext align=»right»][textmarker color=»C24000″ type=»text color»]Las escuelas y universidades no deberían enseñar aptitudes del temario, sino actitudes hacia la vida[/textmarker][/blocktext]
Seguramente no hay que renunciar a la universidad sobre todo en algunas profesiones que necesitan unos estudios y unos conocimientos básicos, como medicina o derecho por ejemplo. Pero por mucho que se van cambiando y cambiando los diferentes sistemas educativos lo que parece evidente es que la formación no es la óptima. Porque no todo tiene que pasar por tener una carrera.
Una buena amiga me contaba su experiencia personal de tener grandes aptitudes por el arte. En el instituto mostró su interés y buen hacer en dibujar y en la pintura e ilustración y parecía que era menos que el resto porque no servía para los estudios. En lugar de estar con los libros y aprendiendo, estaba dibujando y pintando. Perdiendo el tiempo, le decían. Cuando en realidad la deberían haber inducido a explotar esa virtud creativa y no menospreciarla por ello.
Los estigmas en la educación siguen haciendo demasiado daño. Si no terminamos con una carrera en la universidad parece que hemos fracasado, sobre todo muchas veces por culpa de los padres y el entorno más cercano. Hay que explotar el talento allá donde esté. Imaginación, creatividad, educación, responsabilidad… estos son los valores con los que deberíamos terminar la formación. Para que luego, los podamos usar en la vida profesional.
Os dejo con una charla TED que hizo Sir Ken Robinson y que explica de forma brillante su postura sobre la educación. Lo hace con humor y con algunos ejemplos muy ilustrativos.