Escribo este post evidentemente desde mi casa. Como casi todo el planeta, estoy confinado por el COVID-19. Y, también como la mayoría, me he refugiado muchas noches en la compañía de series, documentales y películas a través de las diferentes plataformas de streaming a las que estoy suscrito. Y entre ellas vi, como millones de personas, la última temporada de la Casa de Papel, una serie que me hizo reflexionar en muchos aspectos. Y todos ellos creo que voy a ser capaz de relacionarlos con el mundo del marketing digital. ¡Vamos a ello!

 

CONTENIDO EFÍMERO

Vivimos en la rapidez. En un mundo en el que creamos stories de instagram que duran 24 horas. Lo consumimos todo a un ritmo frenético y con gula. Y con una extraña conexión entre nuestra cabeza y el dedo índice para deslizar, ya sea en Instagram o Tik Tok, para pasar a la siguiente. Sin pudor.

Y con la decisión de Netflix de subir toda una serie de golpe, nos invitan a provocar el mismo efecto. Conozco gente que se ventiló la serie en una noche. Un trabajo que había costado meses de producir, centenares de personas involucradas, millones de euros y se consume en… una noche. Sin tiempo a valorar, madurar, degustar cada uno de los capítulos, de los detalles que aporta una serie como esta.

Cada uno debe saber qué busca y con qué intención con su estrategia de contenidos. Pero siempre he pensado que las series deben consumirse poco a poco, semana a semana, crear la sensación de quedarse con ganas de más, de darle vueltas a los detalles con los amigos durante el período de espera entre episodios. ¿Juego de Tronos o la Casa de Papel? Series de éxito con estrategias de entrega diferente.

 

CONTENIDO PARALELO

Cuando terminas el último capítulo de la Casa de Papel, Netflix te recomienda el documental de la serie llamado «La casa de Papel: El Fenómeno» en que cuentan los inicios de la serie (que hablaremos luego) y sobre todo muchos detalles de cómo se hizo esta última temporada. Vamos, lo de productos relacionados de toda la vida. Ofrece siempre algo más a tus fans, a tus compradores. Que el que quiera más, siempre pueda obtener más.

Pero además ofrece contenido de calidad alternativo a tus fans. Cuando consigues crear una comunidad, aliméntala. Y sobre todo, contando interioridades. Pero no solo de una serie: de tu negocio, de tu podcast, de tu blog, de tu día a día. Conseguirás mostrarte cercano, auténtico y aumentarás el cariño de tus fans. Piensa en hacer un cómo se hizo de tu negociado. Y si estás empezando ahora, muy importante: documéntalo. Grábate vídeos, hazte fotos, guarda esbozos de logo o de estrategia… Si consigues triunfar, poder explicar y recuperar cómo empezaste tendrá un valor increíble. Y si fracasas, no pasa nada. Lo tiras y empiezas con otra historia habiendo aprendido y corregido los errores cometidos. Pero esto es el siguiente punto.

 

 NO TENGAS MIEDO AL FRACASO

Triunfar o fracasar depende de pequeños detalles. Y la mayoría de veces son factores externos que no controlas ni tú. La casa de papel se emitió en Antena 3 en España y tuvo una audiencia muy mala, hasta el punto que la serie no se renovó y se dio por cerrada tras la primera temporada. Pero por un acuerdo entre Atresmedia y Netflix la serie pasó a emitirse en la plataforma a nivel mundial. Netflix solo hizo una pequeña modificación: en lugar de dejar los capítulos de más de una hora cada uno, los redujo a unos 45 minutos y dividió la primera temporada en dos. A eso vamos a sumarle la suerte, la casualidad y que algún influencer la vio, le gustó y la recomendó. Y ¡bum! Éxito mundial. Detalles.

Y ahora, analizan que la serie era perfecta para triunfar: tenía una canción viral (Bella Ciao), una iconografía (las máscaras de Dalí), y diversidad de personajes con el cada uno encuentra a uno para identificarse. Sí claro, pero en Antena 3 fracasó. Tu puedes tener muy clara la fórmula e incluso llevarla a escena a la perfección, pero luego ya no depende de ti, sino de muchos detalles. Si estás emprendiendo y crees mucho en tu idea, no te desesperes. Igual lo estás haciendo bien pero te fallan factores externos. La suerte influye, claro que influye. Pero se combate con constancia y perseverancia. Pero con cuidado y sentido común porque también hay ideas horribles que fracasan porque son desastrosas. Ahí es importante escuchar a gente de tu confianza de dentro y fuera del sector y sacar tus propias conclusiones.

 

LA EMPATÍA CON LOS MALOS

Y he dejado para el final mi tema preferido entre la Casa de papel y el marketing digital: los malos son los buenos. Desde el principio quieres que ganen los atracadores y no quieres que los coja la policía. No es nada nuevo, pero es maravilloso. Ya nos pasa cuando vemos El Padrino, que empatizamos con la mismísima mafia y con crueles asesinos, estafadores y extorsionadores. Pero esa es la fuerza de un buen relato. Con un buen storytelling puedes vender cualquier cosa, incluso que los malos sean los buenos. Pero eso da para otro post. ¡Hasta pronto!