Como olvidar cuando de pequeños alguna vez habíamos visto o entrado en un cibercafé. Pues actualmente solo existe uno en Barcelona, aparte de los locutorios.

Estos estaban pensados para que, si no tenías ordenador en casa o acceso a internet, pudieras ir a tomar algo y a la vez pagar por horas para usar sus periféricos y ordenadores.

¿Dónde ha ido este público? Actualmente la gente dispone de su propia tecnología, puesto que parece esencial para la sociedad. Pero dentro del público objetivo existía el gamer,  el cual iba a los cibercafés para poder jugar a videojuegos.

El producto substitutivo que existe en la actualidad son los centros de alto rendimiento gaming.

Jugar en centros de alto rendimiento como Elite Gaming (https://elitegamingcenter.com/) ofrece a los y las gamers un mundo enorme de posibilidades. Los asientos, los monitores, los teclados, los cascos, los ratones… Todo, absolutamente todo el material responde a los mayores estándares dentro del mundo de los videojuegos. Aunque también existe la posibilidad de llevar tus propios periféricos para sentirte como en casa.

También hay que contar con el éxito de los eSport, un sector que no para de crecer en España. Todas estas oportunidades de no solo visualizar, sino también de participar en algunos eventos, han contribuido a dinamizar los deportes electrónicos. Además, si a esto le sumamos que algunos de estos videojuegos son gratuitos, entendemos el éxito de este sector emergente, ya que sus ingresos se basan más bien en estos eventos y no en las compras ‘ingame’.

Finalmente aparece la imagen de los bares gaming, que trata de un tipo de local enormemente enfocado a la vertiente social del videojuego. Consiste en un bar normal y corriente donde a mayores tienes el tema del gaming. Ordenadores para jugar, consolas y retransmisiones de eSports.

El cliente no ha desaparecido, pero con los cambios constantes de la tecnología ha decidido evolucionar hacia nuevas ideas de negocio más atractivas para el consumidor de videojuegos.

Miquel Sellarès