El otro día escuché por primera vez la palabra “yù yī” y fue entender la definición y ponerme a reflexionar. Me serví un Martini blanco, me senté en mi terraza y mirando la montaña de Montserrat y la puesta de Sol intenté interiorizar un sentimiento.

Yù yī  (玉衣 ) Deseo de ver la vida con ojos frescos y sentir las cosas tan intensamente como cuando las hiciste por primera vez, antes incluso de las expectativas, antes de los recuerdos, antes de las palabras.

Quizás con este texto me alejo de la idea principal de este blog, o quizás no. Pero no está de más parar y pensar, reconocer que en nuestro día a día lo urgente pasa por encima de lo importante y lo importante y/o urgente destruye lo emocionante.

Debemos apasionarnos con cada cosa que hacemos y volver a sentir por las pequeñas cosas. No hay dos proyectos iguales, no deberían existir las soluciones estándares. Vivir nuestro trabajo con pasión y tratar cada cliente como si fuera el más especial es la garantía de sacar un resultado original y bueno.

Yù yī son solo unas letras que definen un deseo de retomar un sentimiento olvidado. Las palabras fueron creadas para incentivar reacciones en quien las lee o escucha, llaves que penetran en nuestras cabezas con una intención determinada.

Cuando comunicamos una idea o queremos transmitir nuestra marca personal o profesional olvídate de consejos milagrosos y definitivos, piensa en aquello que eres y transmítelo con entusiasmo. Cada contenido debe ser único, ser un disparo al corazón de nuestros seguidores y olvidarte de la razón por un instante. Conviértete en una LoveMark auténtica.